Así me siento

Finaliza otro año y no cumplí todo lo que me propuse. Quería bajar de peso, incluso me inscribí en un gimnasio, pero lo abandoné a medio año. Quería comer saludable y, por el contrario, finalizo el año con un problema gástrico por no poder controlarme. En mis apuntes de lo que haría en el 2024 estaba desarrollar más mi inglés. Me inscribí, y los libros están en la estantería llenos de polvo. Sigo sin entender qué me falta para lograr las cosas, de dónde saco las fuerzas y la voluntad para alcanzar esto. Me siento frustrado, estancado y sin ánimos de armar nuevas metas para el 2025 que luego terminaré abandonando. Así me siento.

Desde hace años tengo la costumbre de armar un mapa visual de lo que será mi nuevo año. Antes los realizaba en papel; ahora los hago en una herramienta digital llamada Notion, donde describo cuáles serán mis objetivos y las cosas que quiero lograr en diferentes áreas.

Este año en particular ha sido uno de muchos retos importantes. Al principio inicié con todo el ánimo del mundo, pero conforme pasaron los meses, se fue apagando hasta el punto de que hoy no existe.

Este podcast nace de la necesidad de entender estas cosas, porque estoy cansado de darle vueltas en mi mente a situaciones que siento que me superan pero que a otras personas les resultan muy fáciles.

Hay un fenómeno particular que juega un papel importante en todo esto: las redes sociales. Estas son el espejo de la sociedad actual, una que va a millón en una carrera frenética de hacer cosas. Ves a los influencers haciendo de todo y tú dices: "¿Y yo qué? ¿Estoy atrasado?" Me pasó en particular con la lectura. Sigo a demasiados BookTokers que dicen: "Si no te has leído este y el otro libro, no eres un buen lector". O personas que dicen que en un mes se leen hasta 10 libros, y yo apenas alcanzo a leer 3 y me frustro.

Decidí dejar de verlos y concentrarme en lo que me gusta: leer pausado, subrayar y tomar anotaciones. Es una práctica lenta pero que a mí en particular me sirve mucho, y no pretendo que sea el método de todos.

Sin embargo, revisando mis anotaciones del año pasado, hay muchas cosas que puedo rescatar, enseñanzas que me dejó el hecho de ponerme metas. Algunas son demasiado ambiciosas y otras, sin embargo, las logré en una escala menor a la planteada. Lo cual me lleva a concluir que esta es mi racha, y es a lo que debo aspirar. En vez de decir que leeré 30 libros al año, diré que leeré 12. Si leo más, bien. Pero si no, también.

Y en particular, el 2024 no fue un mal año. Haciendo a un lado mis frustraciones, puedo concluir que fue un año de éxitos laborales y personales. Siempre le doy paso a cosas nuevas, y este año estuvo lleno de retos y experiencias únicas.

Mi mayor meta en este 2025 es la transformación de mi ser. A principios del 2024 leí el libro "Hábitos Atómicos" e intenté poner en práctica algunas cosas. Y es aquí donde subrayar juega un papel importante. Luego de las frustraciones ya mencionadas, me fui de nuevo a mis anotaciones y subrayadas y releí lo siguiente:

La conducta que no es congruente con el yo no será duradera. Puedes querer tener dinero, pero si tu identidad es la de una persona que consume en lugar de crear, seguirás siendo proclive a gastar más que a ganar.

Luego, unas líneas más abajo leí:

Tienes una nueva meta y un nuevo plan, pero no te has transformado a ti mismo.

Y este será mi objetivo principal en el 2025: transformarme en esa persona que hace ejercicios porque es parte de su rutina; que come saludable porque entiende que beneficia a su cuerpo y no por obligación; que lee para divertirse y abandona libros que no le aportan nada a su vida; que comparte con sus amigos porque valora su compañía y que hace las cosas con amor y pasión cada día, encontrando un espacio para sí mismo.

Concluyo pensando que:

El 2024 me enseñó a salir de mi zona de confort, me ayudó a descubrir talentos olvidados y pasiones que estaban guardadas en lo más profundo de mi ser. Me ayudó a redefinir mis metas a largo plazo y a encontrar motivos para hacer lo que amo. Agradezco por las personas que están y por las que no están. Agradezco por aquello que solté y a lo que me aferro hoy en día. Sé que el 2025 viene cargado de muchas sorpresas y nuevos retos, y estoy listo para ellos.